De pajareo por Pitillas...

En Semana Santa, Miguel y yo visitamos la Laguna de Pitillas (Navarra) de la mano de Haritz, excelente anfitrión y gran conocedor del lugar.

Laguna de Pitillas

Las encargadas de recibirnos fueron las graciosas y gráciles cigüeñuelas, entre las cuales encontramos infiltrado un archibebe claro.

Cigüeñuela común

Archibebe claro

Las tarabillas norteñas fueron relativamente abundantes...

Tarabilla norteña

Nuestro objetivo número uno aquí eran los bigotudos, pero esto del pajareo es una quiniela y en esta ocasión no nos tocó el premio.

Sin embargo el carrizal no nos dejó con hambre, y nos obsequió con la observación de varios aguiluchos laguneros, numerosos archibebes, un par de agachadizas que levantamos a nuestro paso, algunas garzas imperiales...

Incluso escuchamos a los avetoros ¡Hasta tres ejemplares distintos!

Aguilucho lagunero (macho)

Aguilucho lagunero (hembra)

Archibebes comunes

Lavandera boyera

Agachadizas comunes

Garza imperial

Uno de los numerosos buenos momentos del día estuvo protagonizado por un bonito macho de corzo que surgió de repente de entre el carrizo. 

Corzo

De camino a otro punto de la laguna tuvimos la gran suerte de observar brevemente un macho de curruca tomillera a muy poca distancia.

¡Bimbo para mí! La única pena fue no haber podido sacarle una foto...

Hábitat de la curruca tomillera

Y para colmo una pareja de roqueros rojos, toda una sorpresa. La hembra estuvo muy reservada, pero el macho sí que se dejó sacar unas fotos.

Roquero rojo (macho)

De nuevo en posición examinamos la lámina de agua con los telescopios, contemplando un adelanto de lo que nos esperaba después...

Miguel y Haritz pegados a los teles

Acuáticas variadas en la Laguna de Pitillas

Finalmente llegamos al observatorio por excelencia de Pitillas, el cual ofrece unas buenas vistas de la laguna y de toda la zona en general.

Observatorio de Pitillas (interior)

Vistas desde el observatorio

Aquí pudimos disfrutar de un buen repertorio de acuáticas, además de fumareles (tanto comunes como cariblancos), aves palustres y limícolas variados.

Tal vez lo más destacado fuesen las cercetas carretonas.

Cerceta carretona (macho)

Focha común con su pollo

Cigüeñuelas comunes

Archibebe común

Combatiente

Archibebe común y Combatiente

Llegó la hora de comer, y con ello la hora de despedirnos de Haritz, quien ya se tenía que volver para casa. Nosotros estuvimos allí un rato más, y cuando ya nos íbamos a ir rumbo a las Bardenas se nos cruzó un lagarto ocelado tremendo.

Lagarto ocelado

Tal y como acabo de decir, quisimos rematar la jornada en las Bardenas Reales.

Bardenas Reales

La idea era intentar encontrar a la collalba negra, pero corrimos la misma suerte que con los bigotudos. Eso sí, no perdimos la ocasión para disfrutar de otras especies típicas de estos ambientes desérticos, tales como las cogujadas montesinas o las collalbas rubias. Miguel incluso escuchó unas gangas ibéricas.

Cogujada montesina

Collalba rubia

Y esto es todo lo que el día dio de sí, una jornada bastante buena a mi parecer.

Quería terminar dándole las gracias a Haritz por hacernos de guía y también a la familia de Miguel por invitarme a pasar unos días con ellos por estas tierras.