Ayer estuve con mis amigos Ignacio y Loreto en el pinar de mi pueblo (norte de Palencia), pues Ignacio tenía antojo de herrerillo capuchino, y aquí resulta particularmente abundante.
Pinar de Corvio
Nada mas llegar fuimos recibidos por nutridos grupos de piquituertos, un pájaro que siempre es agradable ver, y si es en estas cantidades aún más.
Piquituerto
Tampoco tardaron en aparecer los capuchinos, aunque no fueron muy agradecidos para la fotografía. El segundo párido más abundante en la zona, el carbonero garrapinos, tampoco decepcionó.
Herrerillo capuchino
Carbonero garrapinos
Los cableados eléctricos que cruzan los numerosos cortafuegos suponen un buen escenario de canto para numerosas aves. Esta vez la totovía fue la estrella.
Alondra totovía
Al ir acabando comenzaron a cantar los mosquiteros papialbos hasta el punto de que sólo se les oía a ellos, eclipsando a los pinzones y el resto de pajarillos forestales con su prodigioso canto.
Mosquitero papialbo
Aprovechamos el viaje para visitar la colonia de abejarucos, muy desconocida para la gente a pesar de ser la más cercana que tenemos de Cantabria.
Loreto observando abejarucos en el entorno de la colonia
Entre contraluces y demás imperfecciones logré sacarles muy pocas fotos buenas, pero a partir de ahora les visitaré más a menudo.
Abejarucos europeos
Nido de abejaruco
Una pareja de aguiluchos cenizos entretenidos con sus vuelos nupciales pusieron algo nerviosos a los abejarucos, aunque finalmente no hubo mucho conflicto.
Aguilucho cenizo (hembra)
Abejaruco europeo
Un zarcero bastante confiado junto con oropéndolas resonando en la cercana chopera y varios ejemplares de escribano hortelano, que no se dejaron ver, fueron los encargados de ponerle melodía a las observaciones.
Zarcero común
Para acabar decidimos ir a Nestar con un objetivo menos ornitológico.
Triguero
Se trata del Puente de la Perdiz, que se conserva en perfecto estado a pesar de haber sido construido hace unos impresionantes 2000 años.
Puente de la Perdiz
Al cruzarlo levanté la mirada y distinguí sobre la portilla del cementerio una silueta anaranjada. Sin duda se trataba de un ave, pero como para ver el puente no sacamos el equipo no podía distinguirla. ¿Una abubilla?¿Una tórtola? Le tiré una foto, y al visualizarla y aumentarla lo vi... ¡Sorpresón!¡Un críalo!
Críalo europeo
Cuando fuimos a por el equipo salió volando para reunirse con... ¡Otro críalo! Ambos estuvieron moviéndose durante un rato largo en una zona comprendida ente una valla y un campo segado con lindes, haciéndonos disfrutar de ellos como a niños pequeños, pues era bimbo para los tres.
Críalos europeos
En esta zona alcanza uno de sus límites de distribución más septentrionales, habiendo poquísimos ejemplares en la región, por lo que encontrárnoslos fue un verdadero golpe de suerte. Tal y como he puesto en el título de la entrada, un estupendo final para una estupenda jornada pajarera.
Críalos europeos
Hola Alberto, veo que echasteis un rato estupendo y con variedad, ratos que nunca se olvidan, gracias por compartirlos.
ResponderEliminarUn saludo.
-A mí me impresiona más el piquituerto y el capuchino, pero claro hábitats diferentes espcies diferentes.
ResponderEliminarFelicicdades por el bimbo.
Saludos
Hace poco también me encontré con un críalo (un adulto en mi caso) y comparto tu entusiasmo por la novedad, es una de esas aves que siempre te preguntas dónde narices se meten.
ResponderEliminarLo que no he visto nunca son los piquituertos, otro puntazo para una buena salida como ésta.
Saludos.
Hola Alberto. Me llamo César, tú no me conoces (aunque de vista igual si) pero yo a tí sí, de alguna salida con la SEO, y alguna charla en la sede de Astillero. Sigo habitualmente tu blog y te doy la enhorabuena. Yo soy un principiante en esto y me admira lo mucho que sabes a tu edad. Me encantaría ver esa colonia de abejarucos de la que hablas, ¿me puedes indicar más o menos dónde encontrarla? Gracias de antemano y sigue contándonos tan bien tus salidas al campo.
ResponderEliminarHola César, claro que se quién eres. Te doy la localización exacta de la colonia, pero como son muchas indicaciones mejor lo hago por el correo. No tengo el tuyo, así que mejor escríbeme primero al mío (lo tienes en la parte superior derecha del blog).
EliminarUn saludo
Buena ruta ornitológica, yo tampoco he visto los piquituertos... y vaya suerte con la pareja de críalos..., enhorabuena.
ResponderEliminarUn saludo
Muy buena serie Alberto, ¡Qué día más completo! al final el premio con ese par de críalos ¡enhorabuena!
ResponderEliminarSaludos!!
Y tan estupenda! ornitologia en estado puro.Los piquis que pocas he visto y totovia tambien pocos.
ResponderEliminarEl hortelano para otra......
Ademas con amigos........
Saludos camperos!!
Me encanta este tipo de entradas, la que se dedica más a los pajarillos...casi, casi se pueden escuchar.
ResponderEliminarSe merecen también un lugar en nuestros blogs, aunque muchos días se los deje de lado.
Pues que sea enhorabuena ese 'bimbo' que, al parecer, resultó 'la guinda del pastel' ya que el resto del día también disfrutásteis de observaciones bien interesantes.
ResponderEliminarUn saludo desde Pucela.
...y tan estupenda, pero de principio a fin.
ResponderEliminarUn saludo Alberto.
Si que fue una fantástica Jornada llena de avistamientos y fotos de aves, con esa guinda de crialos bimbados para el final, enhorabuena a los tres por el disfrute del día
ResponderEliminarsaludddddddddd
Amigo Alberto: que excursiones que te marcas, aunque en mi zona hay alguna cita de crialo, no lo tengo visto, aunque no desespero.
ResponderEliminarSaludos.
Lolo