En busca de elanios por Oyambre

Esta mañana me he dado una vuelta por Oyambre para intentar ver alguno de los elanios, pero no ha habido suerte. Durante su búsqueda he podido observar chovas piquirrojas, collalbas grises, mosquiteros musicales, cernícalos, ratoneros, un joven de alcaudón dorsirrojo capturando una abeja y una tarabilla norteña.

Chovas piquirrojas

Collalbas grises

Busardo ratonero

Como no encontré a los elanios, me pasé por la Marisma del Capitán para echar un vistazo. Las aves más abundantes eran gaviotas reidoras, garcetas comunes y garzas reales. También había una pareja de cisnes con dos juveniles y tres patos criollos, seguramente escapados de alguna colección privada.

Gaviota reidora

Garceta común

Garza real

Cisnes vulgares

Pato criollo

En una zona de arena y limos se encontraban unos cuantos chorlitejos grandes, así que me acerqué para sacarles alguna foto.

Chorlitejo grande

Mientras me acercaba a los chorlitejos me di cuenta de que tres pequeñas limícolas muy blancas se aproximaban corriendo hacia mí: eran correlimos tridáctilos, y pasaron a escasos cuatro metros de mí indiferentes a mi presencia. Sacarles unas fotos era una tentación a la que no me pude resistir.

Correlimos tridáctilos

Todo esto, junto con el que no consiguiese encontrar ningún elanio, me servirá como excusa para volver otro día.

Al mal tiempo buena cara

El mal tiempo de estos días no me ha permitido salir de pajareo. Menos mal que puedo ver halcones peregrinos simplemente asomándome a la ventana, y que al fin y al cabo me alegran el día cuando no puedo salir.

Halcón peregrino

Desde que finalizó su época de cría no les había vuelto a prestar atención. El otro día me di un paseo por debajo de sus posaderos habituales en busca de restos de alguna presa; sólo encontré la pata de una paloma de hace unos días.

Pero la sorpresa me la llevé cuando tras localizar a uno de los halcones enfoco el telescopio y descubro que es uno de los juveniles de este año, el cual tendría que haber abandonado el territorio de sus padres en junio-julio, tal y como lo hicieron sus dos hermanos. 

Halcón peregrino juvenil

Además, piaba de vez en cuando reclamando la atención de su madre, la cual se encontraba descansando en el edificio de enfrente. Por lo que se ve, la idea de independizarse no le hace mucha gracia a este joven halcón...

Una vuelta por la bahía

Ayer me dí una vuelta por la bahía en busca de limícolas, los cuales he oído que han aparecido en gran número en Santander. No encontré nada de lo que esperaba encontrar, lo único en Pedreña unos 13 ostreros euroasiáticos y tres ejemplares de zampullín cuellinegro.

Ostreros euroasiáticos

Ostreros euroasiáticos y garceta común

Ostreros euroasiáticos y gaviotas sombrías

Zampullines cuellinegros

En Pontejos localicé 18 cisnes vulgares, 3 andarríos chicos y una curruca zarcera.

Curruca zarcera

Y en Astillero un andarríos grande y un grupo de 6 patos colorados.

Patos colorados

Que yo sepa en Santander sólo queda una pareja de autillos, la cual perdió la puesta y lo ha vuelto a intentar (esperemos que esta vez con mejor suerte).

Autillo europeo

Cambio de planes

La noche del jueves me di un paseo por el Parque de la Vaca (Santander) para ver si aún continuaban los autillos. Efectivamente todavía estaban ahí, tanto los adultos como los jóvenes.

Autillo europeo

De repente se cruzó en mi camino un erizo bastante confiadillo, así que dejé los autillos a un lado para dedicarme plenamente al mamífero.

Aproveché el rato que pasó en un camino de piedra para sacarle alguna foto buena.

Tras darse cuenta que aquí no encontraría nada que echarse a la boca, regresó donde realmente está su lugar.

Por Aguilar de Campoo (Parte III)

La limpias aguas del Pisuerga han hecho de Aguilar de Campoo una zona realmente favorable para las nutrias. Los barbos conviven bajo la superficie con las truchas comunes, las cuales no han sufrido la introducción de la trucha arcoiris.

Barbos y trucha común

Por su paso por Alar del Rey, el Pisuerga da lugar al Canal de Castilla, cuyos valores naturales han hecho que se incluya en la Red Natura 2000. Este enclave es utilizado durante el periodo migratorio por el carricerín cejudo y otras aves palustres de interés.

Pero ni siquiera este lugar privilegiado se ha salvado de la introducción de especies invasoras. Un ejemplo es el visón americano, competidor de las nutrias de la zona.

Otro de los casos más conocidos es el cangrejo señal, el cual está desplazando al cangrejo de río autóctono.

Cangrejo señal

La marca blanca en el eje de las pinzas confirma que se trata de un cangrejo señal

Parte inferior de las pinzas rojo intenso para intimidar a sus enemigos

Las orillas del canal se han acondicionado para que la gente pueda recorrerlas a pie o en bici, con lo que todo el mundo puede disfrutar de su riqueza ecológica.

Aquí os pongo un topillo, uno de esos roedores que el año pasado causaron grandes pérdidas económicas a los agricultores de Tierra de Campos, pero que a su vez están sometidos a una gran presión depredadora por parte de rapaces, mustélidos, ofidios, etc.

Topillo

Para finalizar voy a enseñaros una de mis zonas favoritas de pajareo, Gama, conocida por muchos habitantes del municipio de Aguilar por su riqueza de fauna, especialmente de aves.

El paisaje de Gama lo conforman grandes paredes y cortaduras rocosas que se alternan con campos de cultivo y algún que otro bosquecillo. Es una zona poco frecuentada por la gente, por lo que los animales se dejan ver bastante bien.

Alcaudón dorsirrojo

Curruca carrasqueña

Corzo

Los acantilados albergan buitreras, alimoches y otras rapaces rupícolas de gran interés; y en los campos y bosquecillos viven tarabillas, currucas carrasqueña y zarcera, escribanos soteño y cerillo, pardillos, jilgueros, zorzales, alcaudones, milanos reales, etc.

De todas formas este es un lugar que no he explorado mucho, por lo que seguro que hay muchas cosas de la zona que aún desconozco.

Alimoche

Espero que os haya causado buena impresión la zona de Aguilar de Campoo, en la que también hay especies que aún no he visto tales como el roquero rojo, el pechiazul o la perdiz pardilla. 

¡Hasta luego y a seguir con el pajareo!