Estas pasadas navidades también le dediqué parte de mi tiempo al dormidero de gaviotas del Puerto de Santander. Como ya mostré en otra entrada del pasado invierno, son varias las especies que lo componen, con un predominio casi exclusivo de las denominadas gaviotas "grandes".
Gaviotas sombrías (Larus fuscus)
Algunos de los días las aves que pernoctan en estos muelles han llegado a rozar los 1000 ejemplares. El hecho de que el acceso sea restringido lo convierte en un lugar extremadamente tranquilo para ellas, especialmente los fines de semana. La formación de charcos de agua dulce y el continuo aporte de alimento proporcionado tanto por los camiones de carga como por el cercano puerto pesquero no hacen más que incrementar su querencia por este enclave.
Gaviotas sombrías (Larus fuscus) bebiendo agua
Gaviota argéntea (Larus argentatus) alimentándose de un cargamento de pienso
Dormidero mixto de gaviotas en el Puerto de Santander, VÍDEO
Aún así no todos los días son tan tranquilos como a ellas les gustaría, y si cuando ésto ocurre coincide con marea baja la mayor parte de ellas se traslada al arenal de la colindante Dársena de Raos para pasar allí la noche, lugar en el que ya de por sí se forma dormidero de gaviotas "pequeñas".
Dormidero de gaviotas en la Dársena de Raos
Las gaviotas argénteas están teniendo un protagonismo aún mayor del habitual esta temporada. Por el momento la concentración máxima es de 7 ejemplares, coincidiendo esta cifra con el temporal marino del pasado 3 de enero.
Cabe hacer una mención especial a esta enorme adulta que lleva haciéndome compañía desde el primer día.
Gaviota argéntea (Larus argentatus), adulta
Entre las demás argénteas que han pisado Santander también se encuentran 1 cuarto invierno, 2 terceros inviernos, 1 posible segundo invierno y muchos primeros inviernos (la edad predominante con gran diferencia).
Gaviota argéntea (Larus argentatus), 4w
Gaviota argéntea (Larus argentatus), 3w
Posible Gaviota argéntea (Larus argentatus), 2w
Gaviotas argénteas (Larus argentatus), 1w
La presencia de los gaviones también está estrechamente ligada a los temporales, más incluso que en el caso de las argénteas. Durante el ya mencionado temporal contamos con la presencia de 20 de estas enormes bestias, cuando el resto de días la máxima había sido de tres ejemplares.
Gaviones atlánticos (Larus marinus)
Las gaviotas sombrías son la especie predominante del dormidero, con hasta el 75% de la representación, correspondiéndose el porcentaje restante con patiamarillas. Entre las patiamarillas "cantábricas" podemos encontrar alguna que otra "mediterránea", notablemente más grandes que sus primas norteñas y que en las siguientes fotos podemos ver dando muerte a una desafortunada paloma.
Gaviotas patiamarillas (Larus michahellis)
Pero incluso estas grandullonas se retiran cuando el rey aparece para reclamar lo que es suyo... A brutos no los gana nadie.
Gavión atlántico (Larus marinus), adulto
Aunque el título de matador oficial de palomas en el puerto lo porta un animal mucho más noble y especializado.
Halcón peregrino (Falco peregrinus)
Volviendo a las gaviotas, siempre cuento con el aliciente de citar alguna especie rara. Sin duda las "blancas" son las que más anhelo, pero por el momento lo que se ha dejado ver es una joven cáspica, que tampoco está nada mal.
Gaviota cáspica (Larus cachinnans), 1w
Como ya he dicho el dormidero es de gaviotas grandes, pero el día del temporal el mar estaba tan picado que algunas de las pequeñas decidieron unirse también, sumando 86 reidoras cuando lo habitual es que sean extremadamente escasas o incluso ausentes. Entre ellas también localicé un par de cabecinegras, especie que veo por primera vez posada en estos muelles.
Anillada en julio de 2010 por Paul Veron en Borhou, Alderney.
Lleva viniendo a la Bahía de manera ininterrumpida desde 2013, siendo vista siempre en las Marismas de Astillero, lugar al que parece tener querencia a la hora de alimentarse. De hecho ya nos teníamos vistas las caras, pues en 2013 la vi en las Marismas Negras en compañía de Miguel Rodríguez.
Anillada en mayo de 2013 por Julien Gernigon en Les Portes-en-Ré, Francia.
Otra vieja conocida, ya que el invierno pasado también se dejó ver en varias ocasiones en este mismo lugar. Lleva visitándonos por lo menos desde el 2014.
Anillada en julio de 2012 por Julien Gernigon en Les Portes-en-Ré, Francia.
Los inviernos de 2013 y 2014 los pasó en Gozón, Asturias, pero ya desde el año pasado parece haber desarrollado predilección por el Puerto de Santander.
Anillada en julio de 2011 por Roland-Jan Buijs en Róterdam, Holanda.
Tal vez sea una de las gaviotas más famosas de Santander, ya que ha sido vista en multitud de puntos distintos de la Bahía a lo largo de los últimos años, tales como el Parque de las Llamas, la Dársena de Raos o el propio Puerto.
El pasado 30 de diciembre, la juventud del pajareo castellano-leonés al fin logramos coordinarnos para quedar todos juntos y llevar a cabo nuestra primera quedada oficial. El enclave escogido para tal ocasión no fue otro que la Laguna de la Nava (Palencia), tan castigada este año por la falta de agua.
Laguna de la Nava
La laguna ha llegado a estar completamente seca, pero por suerte empezaron a llenarla unos días antes de nuestra visita, siendo la zona del observatorio de Carrapalencia la única que por el momento dispone de lámina de agua. Por desgracia para los gansos este llenado ha sido demasiado tardío, encontrando solo 100-200 ejemplares cuando lo normal por estas fechas sería de varios miles.
Observatorio de Carrapalencia
Ánsares comunes (Anser anser)
También localizamos 14 barnaclas cariblancas y un par ánsares indios, fieles a la zona desde hace varias temporadas. La lista completa de aves observadas la tenemos subida en eBird y podéis consultarla haciendo clic aquí.
Barnaclas cariblancas (Branta leucopsis)
Ánsares indios (Anser indicus)
De allí nos acercamos a la cercana Laguna de Boada, donde esperábamos ver grullas pero no vimos absolutamente nada, y después hacia la macrobalsa de riego de Herrín, en Villalón de Campos. Durante el trayecto hasta este enclave no faltaron varios grupos de avutardas, además de una lechuza atropellada.
Avutardas comunes (Otis tarda)
Lechuza común (Tyto alba), atropellada
Ya en la balsa de Herrín contamos otros 200 gansos (uno de ellos con collar de lectura a distancia) además de un amplio repertorio de acuáticas que también recopilamos en otra lista de eBird visible en el siguiente enlace.
La estrella del lugar fue sin duda el ánsar campestre, seguido de otras dos barnaclas cariblancas más, varios tarros blancos y un macho de pato colorado.
Observatorio de Herrín
Balsa de Herrín
Ánsar campestre (Anser fabalis)
Barnacla cariblanca (Branta leucopsis)
Ánsar común (Anser anser) con collar de lectura a distancia
Tarros blancos (Tadorna tadorna)
Ya saciados nos dirigimos a Paredes de Nava, donde además de unas cañas disfrutamos de una excelente comida en el restaurante La Venta, seguida de una larga sobremesa en la que aprovechamos para intercambiar impresiones acerca de la jornada y también para recordar viejas anécdotas pasadas...
Al caer la tarde volvimos a la Laguna de la Nava, permaneciendo allí hasta que se puso el sol y deleitándonos con la entrada de los gansos y alguna que otra grulla. Después de eso nos reunimos todos juntos de nuevo para tomar una última caña en Fuentes de Nava y así despedirnos como es debido.
Atardecer en el entorno de la Nava
ARRIBA: Miguel Pérez, César Díez, Martín Rey, Javier Hernández, Miguel Rodríguez, Nayib Hamdoun y Pedro Alonso.
ABAJO: Rafael Díez, Fernando Casado, Daniel Saldaña, Javier Pi, Ana Martín y Alberto Benito.
Y hasta aquí llegamos... ¡Ésto es todo lo que dio de sí el día!
La mayoría de nosotros ya nos conocíamos por separado, pero el hecho de haber conseguido coincidir todos a la vez ha sido una verdadera gozada. Sin duda habrá que currárselo para repetir de nuevo, bien aquí o bien en otro sitio.